domingo, 24 de agosto de 2014

10 Ladrones de tu energía.


 
 
1- Deja ir a personas que sólo llegan para compartir quejas, problemas, historias desastrosas, miedo y juicio de los demás. Si alguien busca un bote para echar su basura, procura que no sea en tu mente.

2- Paga tus cuentas a tiempo. Al mismo tiempo cobra a quién te debe o elige dejarlo ir, si ya es imposible cobrarle.

3- Cumple tus promesas. Si no has cumplido, pregúntate por qué tienes resistencia. Siempre tienes derecho a cambiar de opinión, a disculparte, a compensar, a renegociar y a ofrecer otra alternativa hacia una promesa no cumplida; aunque no como costumbre. La forma más fácil de evitar el no cumplir con algo que no quieres hacer, es decir NO desde el principio.

4- Elimina en lo posible y delega aquellas tareas que no prefieres hacer y dedica tu tiempo a hacer las que sí disfrutas.

5- Date permiso para descansar si estás en un momento que lo necesitas y date permiso para actuar si estás en un momento de oportunidad.

6- Tira, levanta y organiza, nada te toma más energía que un espacio desordenado y lleno de cosas del pasado que ya no necesitas.

7- Da prioridad a tu salud, sin la maquinaria de tu cuerpo trabajando al máximo, no puedes hacer mucho. Tómate algunos descansos.

8- Enfrenta las situaciones tóxicas que estás tolerando, desde rescatar a un amigo o a un familiar, hasta tolerar acciones negativas de una pareja o un grupo; toma la acción necesaria.

9- Acepta. No es resignación, pero nada te hace perder más energía que el resistir y pelear contra una situación que no puedes cambiar.

10-Perdona, deja ir una situación que te esté causando dolor, siempre puedes elegir dejar el dolor del recuerdo.

Dalai Lama

jueves, 21 de agosto de 2014

Diez reflexiones de Deepak Chopra


 
 
1. Escucha la sabiduría de tu cuerpo, que se expresa por señales de comodidad e incomodidad. Cuando elijas cierta conducta, pregunta a tu cuerpo que siente al respecto. Si tu cuerpo envía una señal de inquietud física o emocional, ten cuidado. Si tu cuerpo envía una señal de comodidad y anhelo, procede.

 

2. Vive en el presente, que es el único momento que tienes. Mantén tu atención en lo que existe aquí y ahora; busca la plenitud en todo momento. Acepta lo que viene a ti total y completamente para que puedas apreciarlo y aprender de ello; luego déjalo pasar. El presente es como debe ser. Refleja infinitas leyes de la Naturaleza que te han traído hasta este pensamiento exacto, esta reacción física precisa. Este momento es como es porque el universo es como es. No luches contra el infinito de las cosas; por el contrario, sé uno con él.

 

3. Dedica tiempo al silencio, a meditar, a acallar el diálogo interior. En momentos de silencio, cobra conciencia de que estás re-contactándote con tu fuente de conciencia pura. Presta atención a tu vida interior para que puedas guiarte por tu intuición, antes que por interpretaciones impuestas desde fuera sobre lo que conviene o no te conviene.

 

4. Renuncia a tu necesidad de aprobación externa. Sólo tú eres el juez de tu valer; tu meta es descubrir el infinito valor de ti mismo, sin dar importancia a lo que piensen los demás. Al comprender esto se logra una gran libertad.

 

5. Cuando te descubras reaccionando con enojo u oposición ante cualquier persona o circunstancia, recuerda que sólo estás luchando contigo mismo. Presentar resistencia es la reacción de las defensas creadas por viejos sufrimientos. Cuando renuncies a ese enojo te curarás y cooperarás con el flujo del universo.

 

6. Recuerda que el mundo de allí fuera refleja tu realidad de aquí dentro. Las personas ante las cuales tu reacción es más fuerte, sea de amor u odio, son proyecciones de tu mundo interior. Lo que más odias es lo que más niegas en ti mismo. Lo que más amas es lo que más deseas dentro de ti. Usa el espejo de las relaciones para guiar tu evolución. El objetivo es un total conocimiento de uno mismo. Cuando lo consigas, lo que más desees estará automáticamente allí; lo que más te disgusta desaparecerá.

 

7. Libérate de la carga de los juicios. Al juzgar impones el bien y el mal a situaciones que simplemente son. Todo se puede entender y perdonar, pero cuando juzgas te apartas de la comprensión y anulas el proceso de aprender a amar. Al juzgar a otros reflejas tu falta de auto-aceptación. Recuerda que cada persona a la que perdones aumenta tu amor a ti mismo.

 

8. No contamines tu cuerpo con toxinas, ya sea por la comida, la bebida o por emociones tóxicas. Tu cuerpo no es sólo un sistema de mantenimiento de la vida. Es el vehículo que te llevará en el viaje de tu evolución. La salud de cada célula contribuye directamente a tu estado de bienestar, porque cada célula es un punto de conciencia dentro del campo de la conciencia que eres tú.

 

9. Remplaza la conducta que motiva el miedo por la conducta que motiva el amor. El miedo es un producto de la memoria, que mora en el pasado. Al recordar lo que nos hizo sufrir antes, dedicamos nuestras energías a asegurarnos de que el antiguo sufrimiento no se repita. Pero tratar de imponer el pasado al presente jamás acabará con la amenaza del sufrimiento. Eso sólo ocurre cuando encuentras la seguridad de tu propio ser, que es amor. Motivado por la verdad interior, puedes enfrentarte a cualquier amenaza, porque tu fuerza interior es invulnerable al miedo.

 

10. Comprende que el mundo físico es sólo el espejo de una inteligencia más profunda. La inteligencia es la organizadora invisible de toda la materia y toda la energía; como una parte de esta inteligencia reside en ti, participas del poder organizador del cosmos. Como estás inseparablemente vinculado con el todo, no puedes permitirte el contaminar el aire y el agua del planeta. Pero en un plano más profundo, no puedes permitirte el vivir con una mente tóxica, porque cada pensamiento crea una impresión en el campo total de la inteligencia. Vivir en equilibrio y pureza es el más elevado bien para ti y para la Tierra.
 
Deepak Chopra

miércoles, 20 de agosto de 2014

Cultivando el arte de la paciencia.


 
Un hombre estaba encarcelado de por vida en lo alto de una torre. Como no aceptaba esta separación, su mujer tomó la decisión de ayudarle a escapar. Cogió un escarabajo y tras haber atado con delicadeza un hilo de seda extremadamente delgado al insecto, untó sus antenas con una gota de miel. Lo depositó al pie de la torre, con las antenas dirigidas hacia lo alto. El insecto, en su afán de alcanzar la miel, trepó tanto que llegó a la ventana del prisionero. Éste, tras haber dejado libre al escarabajo, tiró el hilo de seda. En su extremo había atado otro hilo algo más grueso. Seguía a este un hilo bramante, tras él una cuerdecilla y finalmente a la cuerdecilla una sólida cuerda que el hombre fijó en el interior de su celda y utilizó para descender de la torre y huir con su mujer.

¿Qué otra lectura podemos hacer de este cuento?

Alejandro Jodorowsky: Que ciertos conocimientos se adquieren a pequeñas dosis. La imagen de la presa en la que uno hace un agujerito es una buena metáfora. Al comienzo el agua simplemente gotea, luego se convierte en un hilillo de agua. Acto seguido, se transforma en un arroyuelo y, por último, el embalse se queda sin agua.

A veces, es preciso comprometerse en una acción o en un trabajo paso a paso, con paciencia y sin afligirse por la falta de resultados inmediatos. ¡Paciencia! Una paciencia infinita ante tus amigos, ante la realidad.

Psico-proverbio de Alejandro Jodorowsky

martes, 19 de agosto de 2014

Doce dones: rutas para la misión del alma.


 
 
Y fue por la mañana cuando DIOS se encontró con sus doce hijos y plantó la semilla de la vida en cada uno de ellos. Uno a uno cada hijo se adelantó para recibir el don concedido.

A ti, Aries te concedo mi semilla el primero, para que tengas el honor de plantarla. Que cada semilla que plantes, un millón más se multipliquen en tu mano. No tendrás tiempo para ver crecer las semillas, pues cada cosa que plantes crecerá más de lo que supones. Serás el primero en penetrar en el terreno de las mentes humanas con mi idea. Pero tu trabajo no consiste en alimentar la idea ni cuestionarla. Tu vida es acción, y la única acción que yo te mando es la de empezar a hacer que los hombres cobren conciencia de mi creación. En compensación de tu buen trabajo te concedo la virtud de la autoestima. Tranquilamente Aries se retiró para volver a ocupar su lugar.

A ti, Tauro te concedo el poder de convertir la semilla en fruto. Tu trabajo es grande y requiere paciencia, pues debes terminar todo aquello que haya sido empezado, para que las semillas no se pierdan con el viento. Ni te cuestionarás ni cambiarás de idea en medio de tu trabajo, ni dependerás de otros para hacer lo que te pido que hagas. A cambio, te concedo el don de la fortaleza. Utilízala sabiamente. Y Tauro retrocedió para ocupar su lugar.

A ti, Géminis te entrego las cuestiones sin respuestas, para que puedas aportar a todos una compensación de lo que el hombre ve a su alrededor. Nunca sabrás porqué los hombres hablan o escuchan, pero en tu búsqueda de las respuestas hallarás el don que te concedo, del conocimiento. Y Géminis retrocedió para volver a ocupar su lugar.

A ti, Cáncer te mando la tarea de enseñarles a los hombres lo que es la emoción. La idea que tengo sobre ti es que le hagas reír y llorar, de modo que todos ellos vean y piensen que la plenitud se desarrolla desde el interior. A cambio te concedo el don de la familia para que tu en plenitud pueda multiplicarse. Y Cáncer retrocedió para ocupar su lugar.

A ti, Leo te encargo la tarea de desplegar mi corazón en toda su brillantez, ante el mundo. Pero debes tener cuidado con el orgullo y recordar siempre que se trata de mi creación y no la tuya. Pero si olvidas eso los hombres se burlarán de ti. Hay mucha alegría en el trabajo que te encargo, si sabes hacerlo bien. A cambio te concedo el don del honor. Y Leo retrocedió para volver a ocupar su lugar.

A ti, Virgo te pido que examines todo aquello que ha hecho el hombre con mi creación. Tienes que escuchar agudamente sus formas y recordarles sus errores, de tal modo que a través de ti se pueda perfeccionar mi creación. A cambio de ello de concedo el don de la pureza de pensamiento. Y Virgo retrocedió para volver a ocupar su lugar

A ti, Libra te encargo la misión del servicio, para que el hombre sea consciente de deberes para con otros. Para que sepa que es la cooperación y el equilibrio, así como la habilidad para reflejar el otro lado de las acciones. Te situaré allí donde halla desacuerdo y recompensaré tus esfuerzos con el don del amor y la belleza. Y Libra retrocedió para volver a ocupar su lugar.

A ti, Escorpio te doy la tarea de que indagues en lo oculto, lo escondido, los misterios y sientas la pasión y los celos. Para descubrir y sacar a la luz, lo oscuro y profundo del alma humana. Porque en lo oculto de cada uno de mis hijos, está la causa de los miedos y sufrimientos. Finalmente cuando regreses a mí, Escorpio, te concederé el don supremo de la firmeza y la profundidad de indagar. Y Escorpio retrocedió hasta ocupar su lugar.

A ti, Sagitario te doy el servicio para que hagas reír a los hombres porque, como consecuencia de su mala interpretación de mi idea, se sentirán amargados. Gracias a la risa darás esperanza al hombre y gracias a ello volverán sus ojos hacia mí. Tocarás muchas vidas, aunque sea por pocos instantes y conocerás la inquietud en cada una de las vidas que toques. A ti Sagitario te concedo el don de la abundancia infinita para que puedas extenderla con la suficiente amplitud como para que puedas alcanzar cada rincón de oscuridad, llevando luz a él. Y Sagitario retrocedió hasta ocupar su lugar.

A ti Capricornio te pido la herramienta de tu frente para que puedas enseñarles a los hombres a trabajar. Tu tarea no será fácil, ya que sentirás que todos los trabajos de los hombres descansan sobre tus hombros; pero a cambio de tu yugo, de tus cargas pongo en tus manos la responsabilidad de hombre. Y Capricornio retrocedió para volver a ocupar su lugar.

A ti, Acuario te entrego el concepto del futuro, para que el hombre pueda ver otras posibilidades. Tendrás que sufrir el dolor de la soledad, pues no te pido que personalices mi amor. Pero a cambio de abrir los ojos de los hombres a nuevas posibilidades, te entrego el don de la libertad, para que con ella puedas seguir sirviendo a la humanidad cada vez que ésta así lo necesite. Y Acuario retrocedió para volver a ocupar su lugar.

A ti, Piscis te encargo la tarea más difícil de todas. Te pido que recojas todas las penas de los hombres y me las devuelvas a mí. Tus lágrimas serán en último término, mis propias lágrimas. La pena que absorberás será el efecto de la mala interpretación que puede hacer el hombre de mi idea, pero tú le ofrecerás la compasión suficiente como para que él vuelva a intentarlo. A cambio de ésta la tarea más difícil de todas te concedo también el mayor don de todos. Serás el único de entre mis doce hijos en comprenderme. Pero este don de la comprensión solo es para ti, Piscis, porque cuando intentes comunicarlo no te escucharán. Y Piscis retrocedió para volver a ocupar su lugar.

Después dijo: Cada uno de ustedes participará de una parte de mi idea. No deberán confundir esa parte con la totalidad de mi idea, ni tampoco deben desear intercambiar partes entre ustedes; porque cada uno de ustedes es perfecto, pero eso será algo que no sabrán hasta que los doce sean uno solo. Porque solo entonces se les revelará la totalidad de mi idea a cada uno de vosotros.

Y los hijos se marcharon, cada uno decidido hacer su trabajo lo mejor posible para poder así recibir su don. Pero ninguno de ellos comprendió por completo ni la tarea a realizar ni el don a recibir, y cuando extrañados regresaron, DIOS dijo:

Cada uno de ustedes cree que los dones de los demás son mejores, en consecuencia les permitiré cambiar. Y por el momento cada hijo se regocijó al considerar todas las posibilidades de la nueva misión. Pero DIOS sonrió y dijo: Regresarán a mí muchas veces, pidiéndome que les alivie de vuestra misión, y en cada ocasión les garantizaré la realización de vuestro deseo.
 
Pasarán por incontables encarnaciones antes de completar la misión original que les di. Les concedo un tiempo incontable para hacerlo, pero solo cuando este hecho, podrán estar conmigo. Serán luz y perfección, el TODO en EL UNO.

Fuente: Martin Schulman; Nodos Lunares y Reencarnación, Astrología Kármica

domingo, 17 de agosto de 2014

Salud y equilibrio.


 
“El estado de salud no es algo absoluto. Se trata de un equilibrio dinámico, no estático. Sin movimiento no hay equilibrio dinámico. Como los equilibristas que para mantenerse sobre la cuerda han de buscar el equilibrio contrarrestando continuamente el propio peso, de la misma manera el estado de salud exige que después de un periodo de estrés se produzca la relajación que lo reequilibre. Si conseguimos comprender la dinámica de la enfermedad, nuestro equilibrio, es decir, nuestra salud, mejorará.”

Marco Pfister

miércoles, 13 de agosto de 2014

Progresar en el plano espiritual.


 
 
Los que creen conseguir la mítica iluminación en un minuto, gracias a las palabras mágicas y secretas que un gurú se dignará comunicarles, cometen un error. El progreso espiritual no se logra a punta de palabras. Ellas sólo sirven de flechas indicadoras del camino, pero éste debe ser recorrido con paciencia y perseverancia. La iluminación será la suma de acciones que hemos hecho para conseguirlas, es decir, el fruto de un colosal trabajo, que muy pocos tienen la paciencia de emprender.

Alejandro Jodorowsky

miércoles, 6 de agosto de 2014

La esperanza es terapéutica.


 
 
La mente humana suele tender a anticipar desgracias. Y sucede que cuando sufrimos antes de lo necesario, sufrimos más de lo necesario. Las estadísticas afirman que el noventa por ciento de nuestros sufrimientos los causan cosas anticipatorias que no han sucedido ni van a suceder. Si uno observa su mente, comprobará que funciona de manera fugaz e inquieta. Se mueve yendo y viniendo entre el pasado y el futuro y discurre rápida entre los polos de la antelación y la memoria. Pero tal función no tiene por qué conllevar la anticipación sufridora que, a menudo, tortura a muchas personas.


La mente cuida de nuestro cuerpo, revisando velozmente registros pasados, a la vez que los proyecta en sucesos por venir. Una función que, aunque nos protege de peligros y previene riesgos, puede generar pensamientos infundados acerca de desgracias venideras. No tenemos más que el presente. El estado de pre-ocupación es estéril, ya que lo apropiado es ocuparse, no pre-ocuparse que es lo mismo que ocuparse antes de tiempo. Recordemos que somos más felices y eficaces creando soluciones que dando vueltas en torno a los problemas. Entretanto, ¿qué mejor que abrir el corazón a la esperanza?


Una mente que procesa el problema, que se acerca una y otra vez a éste y no crea soluciones, es una mente incompetente e incompleta. Una mente sana observa el problema y, rápidamente, lo suelta para reorientarse de inmediato hacia el vislumbre de las soluciones que correspondan. El miedo y la tensión, tan sólo cumplen su verdadera misión cuando movilizan la inteligencia hacia la acción que convenga. Conviene no engancharse al problema y dedicar un corto espacio de tiempo a dar vueltas al mismo, ya que una vez “visto” éste, donde realmente tenemos que poner nuestra visión, es en las soluciones certeras. No miremos tanto al veneno como al antídoto. Y, si al principio éste no se ve, tal ausencia no quiere decir nada. Por el mero hecho de “mirar” dicho espacio, los remedios y soluciones aparecerán progresivamente en la consciencia. Aquello en lo que uno enfoca su atención tiende a crecer, se trate de solución o de problema.


Cuando se quiere ayudar a una persona cuya mente se siente amenazada por problemas venideros, lo mejor que puede hacerse es ayudar a dicha mente a que se torne clara y esperanzada. De esta forma, estará más capacitada para enfrentar las pruebas que se avecinen con ecuanimidad y eficacia.


Entonces, ¿qué mejor apuesta que fomentar la esperanza? Sin duda, la esperanza es la mejor opción de nuestra mente y es el gran rasgo de la inteligencia del alma. La esperanza es complicidad y comunión con una sintonía más amplia. La esperanza es sintonía con ese Poder tan grande que mueve los átomos y las galaxias. Vivir en la esperanza es sentir que, llegado el momento de las encrucijadas, uno sabrá hallar las claves y decidirá lo que entonces haga más falta. La esperanza es saber que el tiempo va a favor y que, cada día, nuestra mente es más competente y sabia. Y de la misma forma que el Universo se expande a velocidades infinitas, nosotros también nos abrimos a lo que, en realidad, somos: Observadores del gran regalo de la consciencia.


Recordemos que al final, todo se arregla, y que, en realidad, nunca pasa nada. Además, si uno reflexiona, termina por reconocer que el dolor y las pérdidas pasadas abrieron nuevas avenidas internas por las que se expandió la consciencia. El dolor que tuvimos que soportar, acompañado de pérdidas, vació nuestro ego y “pinchó” ilusiones que nos esclavizaban. Más tarde, cuando las burbujas se desvanecen, sentimos mayor ligereza y vibramos en la sintonía del alma.

Texto perteneciente al libro del autor: "Inteligencia del alma"

martes, 5 de agosto de 2014

Solo el Creador sabe nuestro verdadero valor.


Esta es una hermosa historia para renunciar a que los demás nos digan lo que valemos…




El joyero


Cuentan que un joven fue a buscar al viejo maestro del pueblo para pedirle un consejo.
-Vengo, maestro, porque me siento tan poca cosa que no tengo fuerzas para hacer nada. Me dicen que no sirvo, que no hago nada bien, que soy torpe y bastante tonto. ¿Cómo puedo mejorar? ¿Qué puedo hacer para que me valoren más?
El maestro sin mirarlo, le dijo:
-Cuánto lo siento muchacho, no puedo ayudarte, debo resolver primero mi propio problema. Quizás después...
y luego de una pequeña pausa el anciano prosiguió:
-Si quisieras ayudarme tú a mí, yo podría resolver este problema con más rapidez y después tal vez te pueda ayudar.
-Encantado, Maestro- respondió el joven, un poco desconcertado por la respuesta y sintiendo que otra vez era desvalorizado, y sus necesidades postergadas.
-Bien- asintió el maestro.
Se quitó un anillo que llevaba en el dedo pequeño y dándoselo al muchacho, agregó:
-Toma el caballo que esta allá afuera y cabalga hasta el mercado. Debo vender este anillo porque tengo que pagar una deuda. Es necesario que obtengas por él la mayor suma posible, pero no aceptes menos de una moneda de oro. Ve y regresa con esa moneda lo más rápido que puedas.
El joven tomó el anillo y partió. Apenas llegó, empezó a ofrecer el anillo a los mercaderes. Estos lo miraban con interés hasta que el joven decía lo que pretendía por el anillo. Cuando el joven mencionaba la moneda de oro, algunos reían, otros le daban vuelta la cara y sólo un viejito fue tan amable como para tomarse la molestia de explicarle que una moneda de oro era muy valiosa para entregarla a cambio de un anillo.
En afán de ayudar, alguien le ofreció una moneda de plata y un utensilio de cobre, pero el joven tenía instrucciones de no aceptar menos de una moneda de oro y rechazó la oferta. Después de ofrecer su joya a toda persona que se cruzaba en el mercado y abatido por su fracaso, montó su caballo y regresó.
Cuánto hubiera deseado el joven tener él mismo esa moneda de oro, así podría habérsela entregado al maestro para liberarlo de su preocupación y recibir entonces su consejo y ayuda. Cuando llegó hasta el anciano le dijo:
-Maestro, lo siento, no se pudo conseguir lo que me pediste. Quizás pudiera conseguir dos o tres monedas de plata, pero no creo que yo pueda engañar a nadie respecto del verdadero valor del anillo.
-Qué importante lo que dijiste, joven amigo- contestó sonriente el maestro- Debemos saber primero el verdadero valor del anillo. Vuelve a montar y vete al joyero. ¿Quién mejor que él para saberlo? Dile que quisieras vender el anillo y pregúntale cuanto te da por él. Pero no importa lo que ofrezca, no se lo vendas. Vuelve aquí con el anillo. El joven volvió a cabalgar.
El joyero examinó el anillo a la luz del candil con su lupa, lo pesó y luego le dijo:
-Dile al maestro, muchacho, que si lo quiere vender YA no puedo darle más que 58 monedas de oro por su anillo.
-¡¡58 monedas!! Exclamó el joven.
- Sí, replicó el joyero- yo sé que con tiempo podríamos obtener por él cerca de 70 monedas, pero no sé si la venta es urgente...
El joven corrió emocionado a la casa del maestro a contarle lo sucedido.
-Siéntate- dijo el maestro después de escucharlo -Tú eres como este anillo: una joya, valiosa y única. Y como tal, sólo puede evaluarte verdaderamente un experto. ¿Qué haces por la vida pretendiendo que cualquiera descubra tu verdadero valor?
Y diciendo esto, volvió a ponerse el anillo en el dedo pequeño. Muchas veces nosotros estamos buscando la aceptación de los hombres, buscamos que nos den el lugar que merecemos. En ocasiones hasta nosotros mismos desconocemos el valor que tenemos. Sin embargo, el Creador sabe de nuestro verdadero valor y el potencial que tenemos porque hechura suya somos.
No permitas que la opinión de nadie te lastime, desaliente o te aleje del verdadero propósito de tu vida, fuiste creado para grandes cosas que Dios preparó desde hace mucho tiempo atrás para ti. Recuerda que sólo el experto sabe el verdadero valor de una joya valiosa y única; sólo Dios sabe tu verdadero valor.

lunes, 4 de agosto de 2014

Calendario del Retorno al Origen.


 

El Retorno al Origen; Formación Constelaciones Familiares.

 
 

La voz de tus ancestros.


 
 
 “El daño se transmite de generación en generación: el embrujado se convierte en embrujador, proyectando sobre sus hijos lo que fue proyectado sobre él, a no ser que una toma de consciencia logre romper el círculo vicioso. No hay que temer hundirse profundamente en uno mismo para enfrentar la parte del ser mal constituido, el horror de la no realización, haciendo saltar el obstáculo genealógico que se levanta ante nosotros como una barrera y que se opone al flujo y reflujo de la vida.

En esta barrera encontramos los amargos sedimentos psicológicos de nuestro padre y de nuestra madre, de nuestros abuelos y bisabuelos. Tenemos que aprender a desidentificarnos del árbol y comprender que no está en el pasado: por el contrario, vive, presente en el interior de cada uno de nosotros. Cada vez que tenemos un problema que nos parece individual, toda la familia está concernida. En el momento en que nos hacemos conscientes, de una manera o de otra la familia comienza a evolucionar. No sólo los vivos, también los muertos. El pasado no es inamovible. Cambia según nuestro punto de vista.

Ancestros a quienes consideramos odiosamente culpables, al mutar nuestra mentalidad, los comprendemos en forma diferente. Después de perdonarlos debemos honrarlos, es decir, conocerlos, analizarlos, disolverlos, rehacerlos, agradecerles, amarlos, para finalmente ver el “buda” en cada uno de ellos. Todo aquello que espiritualmente hemos realizado podría haberlo hecho cada uno de nuestros parientes. La responsabilidad es inmensa. Cualquier caída arrastra a toda la familia, incluyendo a los niños que están por venir, durante tres o cuatro generaciones.”

Alejandro Jodorowsky en “La danza de la realidad”.

domingo, 3 de agosto de 2014

Dios es alegría.


Eres alegría y somos risa
Oh Dios mío, nuestros ojos intoxicados
han distorsionado nuestra visión;
nuestras cargas son pesadas, Perdónanos.
Estás oculto, y sin embargo, de Oriente a Occidente
Has llenado al mundo con Tu resplandor;
Tú luz es más asombrosa
que el alba o la puesta del sol.
Tú eres la conciencia más recóndita
que revela los secretos que contienes.
Eres una fuerza explosiva que hace que surjan nuestros ríos, desbordándose;
Tú, cuya esencia está oculta
mientras Tus regalos se manifiestan visiblemente;
Eres como el agua,
y nosotros somos como piedras de molino.
Eres como el viento, y somos como el polvo;
el viento es invisible, mientras que el polvo es aparente.
Tú eres la Fuente subterránea,
y nosotros somos Tú jardín abundante.
Eres el Espíritu de Vida, y somos como la mano y el pie;
el Espíritu hace que la mano abra y cierre.
Eres Inteligencia, y somos Tú voz,
Tú inteligencia hace que mi lengua hable;
Eres alegría y somos la risa,
pues somos el resultado de la bendición de Tú alegría.
En verdad, nuestro movimiento
es una profesión de fe continua
que da testimonio de Tú Poder Eterno;
así como el giro de la piedra del molino
profesa su fe de que el río existe.
Cae el polvo sobre mi cabeza y mis metáforas,
Estás más allá de lo que podamos pensar o decir;
este sirviente limitado no puede dejar de tratar
de expresar Tú Belleza,
permite a cada instante
que mi alma sea Tú alfombra.

Rumi.