viernes, 28 de agosto de 2015

San Agustín; 28 agosto


San Agustín, doctor de la iglesia, es hijo de santa Mónica, y es el santo patrono de los teólogos y de los impresores de libros. Él nos enseña a conciliar la fe con el intelecto. San Agustín decía: "Una lágrima se evapora, pero una oración la recoge Dios"

martes, 25 de agosto de 2015

Síntomas encapsulados


El ser humano vive inmerso en sus emociones: anticipa problemas, amenazas... y así libera moléculas que alteran las membranas celulares, lo que afecta a huesos, cartílagos, vísceras...: ¡tus órganos lloran las lágrimas que tus ojos se niegan a derramar!



¿Cada órgano tiene su emoción?
La vesícula biliar: amargura, rabia contenida..., que derivará en malas digestiones.

¿Y el corazón?
Un dolor entre pecho y espalda habla de un miedo: bloquea las vértebras que inervan el pericardio, envoltorio del corazón.

¿Y cómo actúa el osteópata?
Con sus manos y arte desbloquea contracciones, moviliza órganos, armoniza el sistema nervioso, reequilibra huesos...

¿Y el hígado, el riñón...?
Filtros: conviene dejarlos reposar y limpiarlos con regularidad, para no intoxicarnos. Por ejemplo, dejar de beber a últimas horas de la tarde... Y la osteopatía visceral puede movilizar esos órganos, beneficiándolos.

¿Movilizarlos?
Sí, cada órgano tiene su movimiento natural propio y podemos promoverlo. Motus vita est: ¡movimiento es vida! Es mi lema.

Un ejemplo.
Movilizar correctamente el intestino puede solventar lumbalgias...

¿Algún consejo desde ese saber?
¡Alcaliniza tu organismo! Los tumores sólo prosperan en un medio ácido, y nuestros malos hábitos nos acidifican e inflaman...

¿Y cómo hago para alcalinizarme?
Cada mañana toma un vaso de agua con zumo de limón. Y consume brócoli. Y reduce carnes, arroz blanco, harinas y azúcares refinados... Y nada de bebidas edulcoradas.



Hábleme de algún paciente suyo.
Una señora se quejaba de que le dolía todo el cuerpo. Es decir, ¡le dolía el alma! La osteopatía es útil: tocar, mover... genera neurotransmisores, endorfinas que llevan a las células un mensaje de bienestar.

¿Abrazarse cura?
Un abrazo largo es curativo: ¡un abrazo de al menos seis segundos propicia esas endorfinas! Siempre digo: "Abraza seis segundos a tus padres y serás más inteligente".

Curioso.
Está estudiado que la entrega al prójimo es el mayor placer, la mayor fuente de endorfinas. ¡Ama a los otros como a ti mismo!
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Fuente: Extracto de una entrevista con David Ponce, doctor en Osteopatía en La Vanguardia

jueves, 20 de agosto de 2015


“Se da en muy raras ocasiones en este planeta que la pareja se comporte como un par de cómplices transgrediendo conscientemente y de forma permanente sus leyes. El matrimonio ya no es lo que era, sin embargo la inmensa mayoría de las parejas la forman enemigos que tratan de destruirse amablemente. 

El hombre trata de destruir ese espejo de su parte femenina a base de aburrimiento o infidelidades, y la mujer intenta destruir al macho que ella misma lleva dentro por el procedimiento de descubrirlo. Hombre tratando de reducir a la mujer y viceversa. Cópulas sadomasoquistas o competidores en la obsesión por los honores y reconocimiento social, pero jamás compañeros en el arte de sentir la vida y zafarse del destino. 

Cuando llegan a alcanzar el Paraíso aparecen los reproches, como expresión de los miedos a gustar, a repetir, a perder. Relaciones parentales jamás aceptadas. Qué difícil es para un hombre admitir que su madre fue la primera mujer y viceversa, y que no hay absolutamente nada de malo en ello, salvo condicionamientos culturales. 

Admitiéndolo, todo lo demás tiene una explicación tan fácil que desaparecen los traumas, los complejos y las obsesiones y ni la mujer trata de destruir al hombre ni viceversa. Pero entonces la sociedad se quedaría sin esclavos y desaparecería la cultura: los seres libres, como los animales, no necesitan cultura”


Juan Trigo; “El retorno de Vivianne. Amantes en el Paraíso”  

Soluciona el problema de raíz.


Un marido flaco y pequeño regresa a su casa antes de tiempo. Mirando por una ventana desde el exterior hacia el dormitorio, ve a su mujer copulando con un enorme luchador de judo. Aprieta los dientes, empuña las manos, se pone rojo, sopla aire candente por las narices, ve el paraguas que el visitante ha dejado en la entrada, se precipita sobre él y lo parte en dos. Después lanza un largo suspiro y masculla: “Y ahora, estoy seguro que se pondrá a llover a cántaros”.

Este hombre espera que el cielo le solucione los problemas que por cobardía no se atreve a enfrentar. Creyendo haber hecho lo necesario, realiza una acción pequeña y se siente satisfecho. Se parece a esos discípulos que le piden a su Maestro que les diga una bonita frase para calmarles sus angustias metafísicas, o los enfermos que le piden al doctor que les cure sus síntomas sin que los obligue a hacerle frente a la causa del mal.

Aquellos seres de voluntad débil viven tragando aspirinas para sumergirse en muy cortos períodos de satisfacción. Quien desee llegar a la sana conciencia, debe ser capaz de encarar voluntariamente su sufrimiento base. Para sanar una herida, primero hay que abrirla y desinfectarla; si no es así, no cicatriza nunca.

Alejandro Jodorowsky

martes, 18 de agosto de 2015

Decálogo de lo que NO debemos hacer con nuestros hijos


(Si algo de lo que se expone a continuación ya lo hemos hecho, no debemos culpabilizarnos, sino parar, y reparar el posible daño causado).

1.- Ponerle el nombre de un antepasado, familiar vivo, antiguo novio o novia, personaje histórico, novelesco, etc

Al pasarle un nombre, le pasamos una identidad

2.-Enviarle mensajes de que fue o es una “carga” (incluso durante la gestación)

Esto hará que tienda al fracaso, por no verse digno, a padecer sentimientos de culpabilidad, o incluso a manifestar comportamientos autodestructivos.

3.-Calificarlo de forma negativa: “eres flojo”, “eres malo”…

En los niños la identidad se forma como un reflejo de lo que sus mayores, como en un espejo, proyectan sobre él con sus verbalizaciones y también y más importante aún, mediante la comunicación no verbal. Si le dices a un niño eres un “demonio”, será un “demonio”…

4.-Proyectar sobre él lo que los padres no pudieron realizar en sus vidas: “este será médico”…

Sería una forma de alejarlo de su propio proyecto vital. Por lealtad, seguirá lo marcado por los padres que es el camino directo hacia la no-realización personal.

5.-Compararlo con cualquier miembro de la familia, ni para bien, ni para mal.

Si te comparan con otra persona cuando eres niño, te programan para seas esa persona. Si las expectativas son muy altas, siempre vivirás frustrado, si las expectativas son muy bajas, fracasaras como el modelo que te impusieron.

6.-Decirle que estamos orgullosos de él.

Es otra forma de decirle que te pertenece y que ejerces poder sobre él.

7.-Decirle que lo queremos porque no nos da problemas, por ser buenísimo.

Si el “contrato” con un niño es: “te quiero a cambio de que no des problema”, el niño vivirá inhibiendo su espontaneidad, autoevaluando al máximo las consecuencias de sus actos, etc. Un excesivo autocontrol impide el crecimiento de la persona y la expresión de la creatividad.

8.- Obligarlos a utilizar las palabras “mamá” y “papá” más allá de la adolescencia, negándoles el derecho a dirigirse a los padres por sus verdaderos nombres.

Estas palabras encierran un compromiso de relación padre-hijos, caracterizado por la dependencia infantil de los segundos a los primeros. Más allá de la adolescencia, es sano renovar este compromiso.

9.-Vestir a dos hermanos de la misma manera. O que el hermano menor se vea obligado a “heredar” ropas y objetos del mayor y a no tener un espacio propio en el hogar.

Implicaría de forma metafórica, no darle “su espacio” a cada uno.

10.- Castigarlo con insultos, golpes, gritos o cualquier tipo manifestación de agresividad.

El niño aprende “los conflictos se solucionan con agresividad” y repetirá este patrón cada vez que tenga problemas. Los castigos deben ser educativos, constructivos, positivos, razonados, relacionados con la conducta a modificar. Añado que la mayoría de las veces, el mejor castigo es el premio a la conducta apropiada.

El niño es dueño de su espacio, contenido y tiempo de juego. Nunca debemos robarle su infancia, por ejemplo haciéndolo excesivamente responsable de sus hermanitos, o queriendo que dedique su tiempo de ocio a las actividades que nosotros no pudimos realizar cuando niños. Los niños son niños y su actividad fundamental es jugar. Jugando crecen en todos los sentidos, aprenden, se divierten, se socializan, interiorizan en su mundo, crean…

Los niños no son receptores vivos proyectos frustrados del árbol. Ayudémosles a que realicen su propio guión de vida.

Tomado de Plano Sin Fin

10 Compromisos de la comunicación en la pareja


1.-Me comprometo a escucharte con la mente abierta, sin colocarte etiquetas ni prejuzgar tu mensaje.

2.-Me comprometo a expresar mis emociones, mis sentimientos y mis necesidades y así, facilito que me comprendas.


3.- Me comprometo a no culparte de mis enfados. Mi rabia es producto de una necesidad no satisfecha, y yo soy la única persona responsable de elegir darme lo que necesito.


4.- Me comprometo, ante los conflictos, a focalizar mi discurso en las soluciones más que en el problema.


5.- Me comprometo a alejarme de al crítica inútil y acercarme a la lección que el conflicto nos enseña.


6.- Me comprometo a expresar agradecimiento, informándote sobre que fue lo que hiciste que satisfizo una de mis necesidades y como me siento por ello.


7.- Me comprometo a pedirte sin exigencias, sin juicio y sin chantajes.


8.-Me comprometo a escucharte cada vez que lo necesites, y hacerlo con atención, con tiempo y con respeto.


9.-Me comprometo a escucharte también con el corazón, porque sé que el exceso de intelecto bloquea la empatía.


10.- Me comprometo a escuchar no sólo tus palabras, porque sé que también te comunicas con tu cuerpo, con el tono de voz y con tu silencio.