Día 5; Cuarenta días de purificación en el agradecimiento consciente.

 Cada instante nos regala la oportunidad de vivir.

Hay un día en que empiezas a ver las cosas no como son, sino como eres.

El talmud.

Muchas personas desconocen cuál es el propósito de su vida, mientras que otras se aferran a la idea que tienen de lo que es su leyenda personal. La molestia se intensifica cuando la misión que  creían propia se ve entorpecida o desviada por una voltereta de la vida y no tenemos ni idea de a dónde nos llevará el siguiente paso. Frecuentemente, exponernos a un cambio drástico en nuestras vidas es el precio que pagamos por un viaje iniciático, sin que haya nada que podamos hacer para evitarlo.

El asunto es que no hay que irse de casa para que un viaje iniciático ocurra. Toda la vida es un viaje, y ese es parte de su encanto. En palabras de Ursula K. Le Guin: “Su trabajo, creo que su trabajo es encontrar su trabajo, y hacerlo. Su trabajo, su propio trabajo; ser humana. Ser humana en el mundo”. El que estemos en la Pachamama hoy, es una prueba segura de que el Gran Espíritu nos mantiene con vida porque estamos destinados para que hacer algo que nadie más puede hacer como nosotros.

Durante todo el trayecto del viaje, algunos de mis compañeros me decían: ¿No crees que debemos hacer una ceremonia, un ritual o un movimiento nosotros? Aunque al principio me negué alegando que estaba en calidad de turista igual que ellos y que no quería sentir la presión de conducir al grupo, múltiples señales me mostraron que este pensamiento era ingenuo. Un líder es alguien que tiene poder para influenciar a otros y provocar en ellos cambios positivos, que le lleven a descubrir y utilizar su potencial.

Por alguna razón, no terminaba de comprender esto…creí que  podía ser líder del grupo a voluntad y traicioné una misión de vida que “elegí” y de la cual suelo decir que estoy profundamente agradecida. Múltiples incidentes ocurridos hicieron que las nubes infantiles se despejaran de mi cabeza. “Un cura no deja de serlo porque no vista el hábito”. Así, al cabo de una semana le dije a una amiga que cada día me preguntaba si lo haría, que si. Estaba disponible y dispuesta para ellos.

Todos los días me preparaba para hacerlo, sin embrago se presentaba un imprevisto tras otro hasta que la ocasión surgió mientras estábamos de transito en Panamá. En medio de todos los pasajeros que iban y venían con las prisas y nervios de los aeropuertos, juntamos tres mesas para hacer un movimiento de lectura de tarot a “ciegas”. Es decir, donde desconocía a quien le estaba hablando el arcano. La pregunta era: ¿Cuál es la invitación (llamado) que me hace la vida después de este viaje? Los mensajes del tarot fueron de una enorme utilidad para todos…

Desde hace un tiempo, creo que nuestros objetivos de vida van cambiando. A lo largo de nuestras vidas, los planes de Dios van cambiando y ajustándose al crecimiento y fortalecimiento que vamos logrando como vasijas. A medida que maduramos espiritualmente, aumentamos nuestra capacidad de contención y los planes del Gran Espíritu  parecen “mayores” ante nuestras pequeñas conciencias.

Hace unos años, la gente que me sigue se preocupo mucho porque había entrado a formar  parte de una congregación en una iglesia cristiana.  ¿No te trae problemas con tu pastor o con Dios el leer el tarot? Aunque respeto profundamente lo que hago desde 1992, mi obediencia al Gran Espíritu esta por encima de lo que  disfruto o creo correcto  para mi. Siempre he estado dispuesta a dejar todo si fuera necesario. Estoy convencida de que Dios tiene planes para mí, y no me ocupo de lo que ocurrirá en el siguiente paso.

Mi pastor nunca me presiono…Hija, lo que hagas es entre tu y Dios solía decirme. Todos los días le pido que me coloque donde quiere que yo este según los planes que tiene para mi le respondía. Para mí, se ha hecho una costumbre preguntarme cada mañana al despertar: ¿Qué Dios espera de mí hoy? De este modo, me mantengo abierta al cambio de objetivos. En ocasiones, llegan los versos de la canción de Serrat:

Hoy puede ser un gran día,
plantéatelo así, aprovecharlo o que pase de largo,
depende en parte de ti.
Dale el día libre a la experiencia para comenzar,
y recíbelo como si fuera fiesta de guardar.

No consientas que se esfume, asómate y consume la vida a granel.
Hoy puede ser un gran día, duro con él.
Hoy puede ser un gran día
donde todo está por descubrir,
si lo empleas como el último que te toca vivir.

Saca de paseo a tus instintos y ventílalos al sol
y no dosifiques los placeres;
si puedes, derróchalos.
Si la rutina te aplasta,
dile que ya basta de mediocridad.

Hoy puede ser un gran día
date una oportunidad.
Hoy puede ser un gran día
imposible de recuperar,
un ejemplar único, no lo dejes escapar.
Que todo cuanto te rodea
lo han puesto para ti.

No lo mires desde la ventana
y siéntate al festín.
Pelea por lo que quieres
y no desesperes si algo no anda bien.
Hoy puede ser un gran día y mañana también.
Hoy puede ser un gran día
duro, duro, duro con él.

Karina.